Fue en 1934, cuando la Sra. M. KLEIN-LECAT, una agricultora graduada por la Sección de Estudios Superiores de la Industria Lechera del INA PARIS (Instituto Nacional de Agricultura) empezó a producir leche de muy alta calidad.

En 1960 y por recomendación del profesor THIEULIN, Presidente de la Academia Veterinaria y miembro de la Academia de Medicina, incorporó a su ganadería situada en Bouvigny-Boyeffles, un laboratorio para elaborar un producto a base de Lactobacillus, utilizando como base esa leche cualitativamente extraordinaria.

Sirviéndose de la ayuda de investigadores del ámbito agroalimentario, consiguió desarrollar un fermento compuesto de Lactobacillus incluyendo el Lb. acidophilus y el Lb. Rhamnosus de cualidades excepcionales que requerían una adaptación previa al cultivo de leche. Estos trabajos se realizaron en 1960 bajo la dirección del profesor CASALIS de la Escuela Nacional de las Industrias Alimenticias de DOUAI (ENSIA).

Tras numerosos ensayos, logró fabricar un producto que presentaba un alto contenido en Lactobacillus VIVOS (proceso patentado).

Encuentro con la central lechera «Laiterie du Climont«

Una feliz coincidencia hizo que en 1966, Christian Haessig, fundador junto con su esposa de una pequeña explotación lechera artesanal afincada en el corazón del macizo de los Vosgos, tuviera el placer de conocer a la Sra. Klein (**): una muy buena conexión se establece entre ambos, con las mismas sensibilidades, los mismos valores humanísticos, y el mismo rigor y voluntad de exigencias hacia sus productos. A partir de este momento y con su visto bueno la Laiterie du Climont pasa a formar parte de sus centrales de producción, que, asistidas por sus amigos y colaboradores científicos, los Sres. Luquet, Alstadt y Lacourt, transmite sus conocimientos especializados del «K» Philus que había desarrollado. Es de hecho, este mismo producto el que hoy producimos bajo la marca K-philus Bio y que se distribuye en la mayoría de las tiendas especializadas en productos biológicos y naturales.

Con el fin de que el producto y su impulso perdure, la Sra. Klein ha creado una sociedad que gestiona la conservación de las cepas específicas del K-Philus y garantiza tanto la acreditación de las centrales de producción, como la calidad de los productos distribuidos.